No es nuevo, ni tampoco tiene nombre científico la moda dentro del movimiento “art déco” que reutiliza o recicla tanto parcial como incluso totalmente piezas o vehículos que bien por siniestro bien por llegar al fin de su vida no tenían más futuro que el desguace o chatarrería; esta pasión empieza a tener adeptos como ha pasado en el reciclado de pales de obra como mobiliario.

La obsolescencia programada es difícil de frenar, pero no debemos de olvidar que la misma regula tan solo los productos no los materiales, estos últimos por conciencia y responsabilidad medioambiental pueden y deberían de tener una segunda vida; con ello sin duda contribuimos con un pequeño granito de arena a la reducción del CO2 y apoyar la famosa regla de oro de los ecologistas o “regla de las tres erres”: Reciclar, Reducir, Reutilizar.

Si te apasiona el mundo del motor, de la decoración o ambos dos puedes crearte un mueble con utilidad o simplemente como decoración cuyas ventajas principales van a ser la exclusividad y el costo del mismo.

Mesas, camas, armarios, lámparas,.. cualquier objeto o mueble pueden ser el resultado de tú primer diseño, seguro que ya estás pensando en algo; no tiene por que ser complicado ni voluminoso, yo hice una mesita con la llanta dañada de un Porsche Cayenne, una lámpara con un cargador de batería estropeado entre otros cuyas fotos os muestro en el presente.

Este movimiento puede que no termine de imponerse como una moda, pero lo que es cierto que cada vez las decoraciones son más similares y sin darnos cuenta a la vez que nos “ikeizamos” sin querer involuntariamente reprimimos nuestra imaginación.

Es probable que tengas alguna idea y no te sientas capacitado o con recursos para llevarla a cabo, pues aún recurriendo a un artesano, metalistero, carpintero, …ect, el resultado sea suficientemente satisfactorio y merezca la pena no solo a nivel económico sino de tener la satisfacción de tener una obra de autor única y exclusiva, ¿a que esperas para dar rienda suelta a tu imaginación?.