El rascacielos hasta ahora el máximo exponente de la arquitectura moderna, deja paso a otro tipo de construcciones grandiosas en las que el diseño y el equilibrio entre estructura y arte consigue hacer realidad edificios como el de la sede de TV de China en Pekín diseñado por Rem Koolhaas.

Koolhaas imaginó un edificio cuya forma tridimensional ofreciera al personal de CCTV poder realizar las funciones dentro de “un bucle continuo”, aludiendo a un circuito cerrado de televisión, y presentado el comienzo de un desafío de ingeniería.

El nuevo edificio consta de dos altas torres en forma de L, unidas en la cima y en la base en un ángulo que forma un lazo, y que ha sido descrito como una cruz en Z.

Diseñado por OMA como una reinvención de los rascacielos, como un bucle, se comenzó la construcción del edificio en 2004. Con aproximadamente 473, 000m2, la sede de CCTV alberga estudios de televisión, oficinas e instalaciones de radiodifusión y producción. Se trata del mayor proyecto de OMA y su primer edificio importante en China.

El presupuesto fue nada más y nada menos que 600.000.000 €